Soy abogada de profesión y de vocación. La práctica profesional de estos últimos 30 años me permite entender y plantear eficazmente los asuntos que me confían. Como una parte complementaria de actividad profesional, participo en la vida del ICAM, que me ha distinguido con el premio Premio Secciones 2020 – Sección de Esports, Actividades Recreativas y Espectáculos Públicos por el artículo “La cultura en fase 0: la futilidad del RD-Ley 17/2020 sobre los contratos del sector público de “interpretación artística” en estado de alarma (COVID19)” y escribo sobre asuntos jurídicos de actualidad, como la libertad de expresión en la cultura de la cancelación (“Cosi fan tutte o Mala mujer ¿debe protegerlas el Derecho?” en Libertad, arte y cultura: Reflexiones jurídicas sobre la libertad de creación artística).
En un mundo jurídico complejo y cambiante, es imprescindible el estudio de los principios jurídicos y de la jurisprudencia nacional e internacional así como la reflexión académica, a lo que me enfoco como profesora de Derecho Administrativo en el Grado en Derecho de la URJC, de los Másteres en Protección de Datos y Transparencia y de Abogacía de USP-CEU y en el Máster de Derecho Ambiental de la Universidad Europea.

Aunque mi especialidad es el Derecho Público (principalmente derechos fundamentales, medio ambiente y concesiones, función pública, protección de datos y asuntos tecnológicos) considero que el conocimiento jurídico no puede parcelarse y sólo eres un buen jurista si encuadras los casos que se te plantean desde una perspectiva global, a partir de los grandes principios cuyo origen está en la antigüedad clásica, si conoces las reglas del razonamiento lógico, si sabes argumentar y, sobre todo, si estás dotado de sentido común.